Aquellas empresas que se muestran proactivas en el mercado laboral, atraerán la atención de los mejores talentos.
En los últimos años ha cambiado la visión del trabajo tanto para los empleadores como para los trabajadores. En este año de consolidación y en los años a venir, la alta competencia de talentos, una generación nueva de trabajadores, y la presión constante por reducir costos mientras el crecimiento económico se desacelera definirán los principales desafíos laborales.
Uno de los principales desafíos recaerá sobre los jefes de área. Según un estudio, el 60% de los empleados considera a su jefe como la conexión más directa con la cultura de la compañía, mientras que estos buscan cumplir con las expectativas de la dirección y aquella de las personas a su cargo en términos de línea de carrera, satisfacción, compromiso y resultados.
Un segundo cambio importante será la ampliación en los criterios de búsqueda de talentos. Con una mayor cantidad de trabajadores que comienzan a explorar otras experiencias y caminos laborales, las empresas podrían enfrentar dificultades para reclutar talento utilizando los métodos tradicionales. Esto dará paso a que las empresas comiencen a evaluar el talento por la habilidad y potencial de poder desempeñar el rol, en lugar de la experiencia laboral de la persona en el puesto.
Finalmente, un tercer desafío, entre los más críticos, será el bienestar del trabajador. Según un reporte sobre el bienestar en el trabajo, el 60% de los trabajadores enfrentan estrés laboral. Los últimos años de turbulencia económica, crisis sanitaria, confrontación política y cambios climáticos han tenido un costo mental para las personas impactando en la productividad, el compromiso y en los conflictos laborales-personales de las personas. Esto crea una oportunidad para los empleadores de ofrecer comprensión, acompañamiento y programas que se enfoquen en desarrollar resiliencia en sus colaboradores.
Entre estos y otros desafíos, aquellas empresas que se muestran proactivas en solucionarlos se diferenciarán en el mercado laboral, atrayendo la atención de los mejores talentos. Pero al mismo tiempo crearán un clima laboral positivo, uno que se centre en las personas, en su cuidado y en la valoración de estas.